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jueves, 17 de mayo de 2012

Michel Huglo. In memoriam

Copio literalmente la necrológica aparecida en  la web de la Sociedad Española de Musicología: 

 http://www.sedem.es/es/actualidad/noticia.asp?id=33 


Michel Huglo. In Memoriam

Imagen asociada a la noticia
El domingo pasado, día 13 de mayo, falleció en Maryland, Estados Unidos, el musicólogo Michel Huglo (Lille, Francia, 14 de diciembre de 1921). Tras asistir al concierto de gregoriano que, el viernes día 11, sus colegas y amigos de la Universidad le dedicaron en la Michelle Smith Performing Arts Library del College Park como homenaje por sus 90 años cumplidos en diciembre pasado, cayó rendido en lecho de muerte. Michel Huglo participó en el simposio sobre el Antifonario de León que organizó la SEdeM en dicha ciudad del 24 al 26 de marzo de 2011 con la ponencia titulada Liturgical Chants from the Book of Revelation in the Old-Hispanic and Romano Frankish Liturgies.
Quienes asistimos al Simposio Internacional celebrado en León sobre el Canto Mozárabe, tuvimos el privilegio de verle por última vez en Europa. Hizo entonces un esfuerzo sobrehumano para venir a España ya en silla de ruedas, pero lo hizo con extraordinaria alegría, como era bien patente. A España acudía generosamente siempre que la Sociedad Española de Musicología le llamaba para participar en algún evento.
No perteneció a ninguna asociación de hispanistas, pero debe ser considerado como uno de los más egregios. Sus investigaciones, sus escritos, sus conversaciones sobre la música de la Edad Media y de la Antigüedad han colocado a la Península Ibérica en un lugar privilegiado porque, según comentaba una y mil veces, fueron los visigodos peninsulares los verdaderos herederos de la cultura romana, también en el terreno de la música, de la transmisión de su teoría y de su práctica. Fue, asimismo, acérrimo defensor del influjo hispánico sobre la cultura y la música medieval en general. Precisamente, uno de sus primeros trabajos, de 1955, publicado en Hispania Sacrasobre «Les preces des graduels aquitains empruntées à la liturgie hispanique», tuvo gran repercusión entre los musicólogos y liturgistas. Seguidamente, las aportaciones de este gran investigador en el ámbito de la musicología española son innumerables, hasta sus últimos estudios sobre la Musica Isidori y los diagramas que acompañan a este tratado en numerosos manuscritos visigóticos, asunto en el que todavía andaba inmerso.
Muchos de los miembros de la Sociedad Española de Musicología hemos tenido con Michel Huglo una relación personal extraordinaria, porque una gran humanidad venía ligada a su gran inteligencia, a su ilimitada generosidad y a su irrefrenable deseo de agradar y favorecer a los demás.
Conocí a Michel Huglo en Solesmes, cuando yo tenía 17 años y empezaba a estudiar gregoriano y teología en esta abadía. Canté durante varios años con él en el coro, y departí con él sobre mil temas filosóficos, políticos (en Francia se estrenaba por entonces, con el General De Gaulle, la V República) y paleográficos en nuestros paseos de los jueves al lado de los Padres Benoît-Castelli, Jean Claire y, cuando venía de Roma, Eugène Cardine. Posteriormente, la fraterna amistad que hemos seguido manteniendo ha sido producto sobre todo de su generosidad. Nuestro socio de honor de la SEdeM, el Padre José López-Calo, tuvo con Michel Huglo una especial relación, muy notablemente después de abandonar la abadía de Solesmes. Muchas veces escuché palabras de agradecimiento por el apoyo personal que recibió del Padre Calo.
Sólo me resta manifestar nuestro gran pesar por su desaparición, y expresar a su esposa Barbara Hagg-Huglo, nuestra cercanía y afecto.
Con motivo de cumplir 90 años el pasado diciembre, le enviamos a su casa de Maryland un centro de flores con un epigrama latino tetrástico que le dedicamos, en nombre propio y en el de los muchos amigos musicólogos de España. No es cuestión aquí de reproducir su emocionada respuesta. Creo que aquel rudimentario epigrama, tiene hoy más sentido que entonces, por la nostalgia de su desaparición.
Ismael Fernández de la Cuesta

In laudem Michaelis Huglo
Tetrastichon Epigramma
Nonagenarius, o nostri gloria saecli,
Musas colentibus, Michael, lucem affers.
Barbarae tuae amore prospera vale
Blanda docens facie multis per annis auctor.
 

Es imposible sustraerse a la tristeza que invade a quienes conocimos a un ser entrañabale, sabio donde los haya y humilde hasta el exceso. A lo largo de mis clases, a lo largo de los años, no hay día que no lo haya mencionado. Y así pervivirá en la memoria de quienes le conocimos: fuente de sabiduría y de generosidad. 
Descanse en paz.

martes, 15 de mayo de 2012

¿A salvo? En el servicio y en la renuncia (Mawlana Rumi)


Días y días sin escribir, y hoy, fiesta de San Isidro en Madrid, acudo a un poeta sufí, Yalal ad-Din Muhammad Rumí*, por todo y por nada. Algunos de los versos de sus poesías, de ésta, resumen sentimientos y emociones. Y quien pueda cantarlos en árabe, hágalo utilizando las melodías mozárabes de las Lamentaciones de Jeremías, y comprobará que un mismo lenguaje musical es capaz de abrazar los profundos sentimientos de todas las religiones.  

Página de un manuscrito de la obra de Mevlana (Rumi)
 
"Diwan-e Shams-e Tabriz-i", datado en 1503. Shams ud-Din Tabriz, 1502-1504, BNF Paris. 


Preguntó, " ¿Quién llama a mi puerta?"
Respondí, "Tu humilde servidor".
Preguntó, "¿Qué asunto te trae por aquí?"
Respondí, "Vine a saludarte, oh Señor".

Preguntó, "¿Cuánto más viajarás?"
Respondí, "Hasta que me detengas".
Preguntó, "¿Hasta cuándo hervirás en el fuego?"
Respondí, " Hasta que puro quede".

"Este es mi juramento de amor.
Por amor,
renuncié a fortuna y posición".

Dijo, "Has defendido tu caso
Pero no tienes testigos".
Respondí, "Mis lágrimas son mis testigos;
la palidez de mis rostro es la prueba".'
Dijo, "Tu testigo no tiene credibilidad;
tus ojos están demasiado húmedos para ver".
Respondí, "Por el esplendor de tu justicia
mis ojos están limpios y libres de culpa".

Preguntó, "¿Qué buscas?"
Respondí, "Tenerte como mi constante amigo".
Preguntó, "¿Qué quieres de mí?"
Respondí, "Tu abundante gracia".

Preguntó, "¿Quién fue tu acompañante en el viaje?"
Respondí, "El pensar en ti Oh, Rey".
Preguntó, "¿Qué te ha llamado aquí?"
Respondí, "La fragancia de tu vino".

Preguntó, "¿Qué te da la mayor satisfacción?"
Respondí, "La compañía del Emperador".
Preguntó, "¿Qué encuentras aquí?"
Respondí, "Cien milagros".
Preguntó, "¿Por qué está el palacio desierto?"
Respondí, "Todos temen al ladrón".
Preguntó, "¿Quién es el ladrón?"
Respondí, "El que me impide estar contigo".

Preguntó, "¿Dónde se puede estar a salvo?"
Respondí, "En el servicio y la renuncia".
Preguntó, "¿A qué hay que renunciar?"
Respondí, "A la esperanza de la salvación".

Preguntó, "¿Dónde hay calamidad?"
Respondí, "En la presencia de tu amor".
Preguntó, "¿Cómo te beneficias de esta vida?"
Respondí, "Manteniéndome verdadero conmigo mismo".

Ahora hay que guardar silencio.
Si te contara sobre Su verdadera esencia
¡saldrías volando de ti mismo para siempre,
y no habría puerta ni techo que te pudiese frenar!

(Rumi - In the Arms of the Beloved, Jonathan Star
Jeremy P. Tarcher/Putnam, New York 1997)

* Yalal ad-Din Muhammad Rumí en árabe, también conocido como «Mawlana», «Mavlana» o «Mevlânâ», MAESTRO, fue un célebre poeta místico musulmán persa y erudito religioso que nació el 30 de septiembre de 1207 en Balj, en la actual Afganistán —aunque en aquella época pertenecía a la provincia del Gran Jorasán de Persia— y murió en Konya —en aquella época parte del Sultanato de Rüm, de la dinastía de los turcos selyúcidas—, un 17 de diciembre de 1273 .La importancia de Rumí trasciende lo puramente nacional y étnico. A través de los siglos ha tenido una significativa influencia en la literatura persa, urdú y turca. Sus poemas son diariamente leídos en los países de habla persa como Irán, Afganistán y Tayikistán y han sido ampliamente traducidos en varios idiomas alrededor del mundo.


domingo, 8 de abril de 2012

Dominica Sancta Paschae


2 Creció como un retoño delante de él, como raíz de tierra árida. No
tenía apariencia ni presencia; (le vimos) y no tenía aspecto que pudiésemos
estimar.
3 Despreciable y desecho de hombres, varón de dolores y sabedor de
dolencias, como uno ante quien se oculta el rostro, despreciable, y no le
tuvimos en cuenta.
4 ¡Y con todo eran nuestras dolencias las que él llevaba y nuestros
dolores los que soportaba! Nosotros le tuvimos por azotado, herido de Dios
y humillado.
5 El ha sido herido por nuestras rebeldías, molido por nuestras culpas.
El soportó el castigo que nos trae la paz, y con sus cardenales hemos sido
curados.
6 Todos nosotros como ovejas erramos, cada uno marchó por su
camino, y Yahveh descargó sobre él la culpa de todos nosotros.
7 Fue oprimido, y él se humilló y no abrió la boca. Como un cordero
al degüello era llevado, y como oveja que ante los que la trasquilan está
muda, tampoco él abrió la boca.
8 Tras arresto y juicio fue arrebatado, y de sus contemporáneos,
¿quién se preocupa? Fue arrancado de la tierra de los vivos; por las
rebeldías de su pueblo ha sido herido;
9 y se puso su sepultura entre los malvados y con los ricos su tumba,
por más que no hizo atropello ni hubo engaño en su boca.
10 Mas plugo a Yahveh quebrantarle con dolencias. Si se da a sí
mismo en expiación, verá descendencia, alargará sus días, y lo que plazca a
Yahveh se cumplirá por su mano.
11 Por las fatigas de su alma, verá luz, se saciará. Por su conocimiento
justificará mi Siervo a muchos y las culpas de ellos él soportará.
12 Por eso le daré su parte entre los grandes y con poderosos repartirá
despojos, ya que indefenso se entregó a la muerte y con los rebeldes fue
contado, cuando él llevó el pecado de muchos, e intercedió por los rebeldes.
(Isaías 53 )
 
Pese a esto, pese a todo, 
gracias a todo, gracias a esto,
oh felix culpa!
 ¡Feliz Pascua!
Bamberg, D-BAs lit. 6, f. 40v

Cod. Sang. 375, St. Gallen Stiftsbibliothek

 Saint-Maur-des-Fosses,  f. 341

Sankt-Gallen, CH-SGs 376, f. 199

martes, 3 de abril de 2012

Un luminoso Martes Santo: De compartir escena con Elvis Presley a monja de clausura: un documental de Oscar



M. Dolores Hart. 
               La monja benedictina Dolores Hart, nominada al Óscar al mejor cortometraje documental, era actriz y decidió convertirse en religiosa de clausura. Ha confirmado que asistirá por primera vez desde 1959 a los Premios Óscar, en Los Ángeles (Estados Unidos), para apoyar la película "Dios es Más Grande que Elvis" que narra su historia y la de su abadía.
            Hart, de 73 años, fue una premiada actriz que participó en dos películas de Elvis Presley. En 1963, estaba a punto de firmar un contrato de siete cifras y estaba comprometida con un hombre de negocios de Los Ángeles cuando decidió unirse a la Abadía Benedictina de Regina Laudis, donde ahora es priora.
            El documental de 37 minutos cuenta la historia de la madre Dolores y su vida en la abadía. Está nominada al Óscar en la categoría de mejor cortometraje documental. "Adoraba Hollywood. No me fui porque fuera un lugar de pecado" señaló la religiosa al diario estadounidense USA Today.
            "Dejé Hollywood por una cosa misteriosa llamada vocación. Es una llamada que viene de otro lugar que llamamos Dios, porque no tenemos ninguna otra forma de llamarlo". La religiosa indicó que esta llamada "es la llamada del amor. ¿Por qué subes a una montaña?". Hart dijo que ella permitió el ingreso de cámaras a la abadía para ayudar a aquellas almas que están en búsqueda. "Queríamos invitar al mundo a otro orden de vida que podría dar algo de esperanza", dijo.
Abbey of Regina Laudis, 273 Flander Road
Bethlehem, Connecticut, 06751 U.S.A.
            Para el documental la madre Dolores fue entrevistada junto a otras religiosas como la hermana John Mary, de 44 años, una ejecutiva publicitaria formada en Oxford que llegó a la abadía después de un periodo de adicción.
            El cortometraje también cubre la última reunión entre la religiosa y su ex prometido, Don Robinson. Él nunca se casó y continuó visitando y ayudando a la abadía hasta su muerte, ocurrida en diciembre de 2011.
            La directora del documental, Rebecca Cammisa, dijo que hizo la película para indagar qué hace que alguien con el nivel de éxito que tenía la madre Dolores Hart escoja la vida religiosa. Cammisa fue anteriormente nominada al Óscar por el documental "Which Way Home" (¿Cuál es el camino a casa?), en el que narra la situación de los niños migrantes mejicanos.
            La madre Dolores fue una de las presentadoras en los Premios Óscar de 1959 y sigue siendo miembro votante de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas, que entrega el premio cada año. En enero de este año, Dolores Hart hizo una inusual aparición pública durante la Conferencia Eucarística Mariana de California Central.

Sus grabaciones discográficas de canto gregoriano pueden encontrarse en la web del monasterio


miércoles, 28 de marzo de 2012

Domingo de Ramos... y una reflexión



El próximo domingo, Dominica in Palmis, Domingo de Ramos, comienza a Semana Santa. Ahí os dejo unos enlaces útiles para acceder a los cantos y sus partituras.

Entrada de Jesús en Jerusalén (icono bizantino)

Hebdomada Sancta
Dominica in Palmis de Passione Domini
Antiphona: Hosanna filio David (34.9s - 548 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
 
 Ad processionem
Procedamus (8.3s - 133 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
Antiphona: Pueri... portantes (2m24.9s - 2266 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
Antiphona: Pueri... vestimenta (1m18.4s - 1228 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
Hymnus ad Christum Regem: Gloria, laus (2m43.7s - 2558 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
Responsorium: Ingrediente Domino (3m34.2s - 3350 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
 
 
Ad Missam
Domingo de Ramos en el Monasterio de El Paular (Madrid)
Tractus: Ps. 21, 2-9.18.19.22.24.32 Deus, Deus meus (1m54.7s - 1794 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
Graduale: Phil. 2, 8. V. 9 Christus factus est (2m19.3s - 2178 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
Offertorium: Ps. 68, 21.22 Improperium... et dederunt (2m40.2s - 2504 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif
Communio: Mt. 26, 42 Pater, si non potest (3m28.0s - 3252 kb) http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/partitu3.gif

http://www.christusrex.org/www2/cantgreg/missa_dominica_in_palmis.html

Y una reflexión, al hilo de esta Semana.  En su novela más famosa, “The Unbearable Lightness of Being” (La Insoportable Levedad del Ser”), el afamado escritor checo Milan Kundera sopesa la equiparación: “¿Qué tiene más valor, la pesadez o la levedad?” Y responde: “La pesadez puede aplastarnos, pero la levedad y ligereza pueden hacerse insoportables”:

“La más pesada de las cargas nos aplasta, nos ahogamos bajo ella, nos inmoviliza contra el suelo. Pero… cuanto más pesada sea la carga, más cercanas a la tierra se vuelven nuestras vidas, llegan a ser más reales y más auténticas. Y a la inversa, la ausencia absoluta de una carga pesada hace que el hombre sea más ligero que el aire, que remonte el vuelo hasta la altura, que se despida de la tierra y de su ser terreno y llegue a ser real sólo a medias, y que sus movimientos sean tan libres como insignificantes. Entonces, ¿cuál de las dos elegimos? ¿Pesadez o liviandad?... Esa es la cuestión. La única certeza que tenemos es: La oposición levedad/pesadez es la más misteriosa, la más ambigua de todas”.
http://www.ciudadredonda.org/articulo/una-equiparacion-obsesionante-sufrimiento-y-valia



jueves, 12 de enero de 2012

La luminosa belleza del canto


Abbaye de Downside (Inglaterra)
http://www.flickr.com/photos/bathintime/3108381886/

La gente abarrota los monasterios, ve a los monjes, se queda para el canto de las Vísperas... ¿Cómo pueden descubrir que esta «nada» que hacen los monjes es la revelación de Dios? ¿Por qué no piensan, por el contrario, que los monjes no son más que unos vagos, unas personas sin ambición, incluso unos fracasados que no son competitivos en la lucha diaria de la vida por ganarse el pan? ¿Cómo pueden vislumbrar que es Dios el que está en el centro de sus vidas? Sospecho que lo hacen cuando escuchan su canto. La autoridad que está detrás de esa interpelación que siente la gente se encuentra en la belleza de la alabanza que ustedes elevan a Dios. Unas vidas que no tienen ningún propósito especial son para los demás un rompecabezas y un interrogante. «¿Por qué están ahí esos monjes y qué fin tienen sus vidas? ¿Cuál es su propósito?». Lo que pone de manifiesto la razón por la que ustedes están ahí es la belleza de la alabanza de Dios. Tengo que confesar que yo no era muy religioso cuando era un joven estudiante en la abadía de Downside. Fumaba detrás de las aulas y me escapaba por la noche a los bares. Casi fui expulsado de la escuela por leer durante la bendición un conocido libro de mala fama, El amante de Lady Chatterley. Si algo me mantuvo anclado en mi fe, no fue otra cosa que la belleza que descubrí allí: la belleza del Oficio cantado, la luminosidad del amanecer en la abadía, el resplandor del silencio. Era la belleza que ya no me dejaría escapar.
            Seguramente no es casual que el gran teólogo de la belleza, Hans Urs von Balthasar, recibiera su primera educación en Engelberg, un colegio benedictino famoso por su tradición musical.  Balthasar habla de la «auto-manifestación» de la belleza, de su «intrínseca autoridad». No se pueden poner en duda las interpelaciones que la belleza nos hace, ni tampoco descartarlas. Y aquí radica, probablemente, la forma más importante de autoridad que Dios puede tener en nuestra época, en la que el arte se ha transformado en un tipo de religión. Poca gente va a misa los domingos, pero millones van a conciertos, galerías de arte o museos. En el arte podemos vislumbrar la gloria de la belleza de la sabiduría de Dios, que danzó en el momento en que creó el mundo, que fue creado «más bello que el sol» (Sab 7). En los LXX, cuando Dios hizo el mundo, vio que era bello. La bondad nos congrega bajo la forma de lo bello. Cuando la gente escucha la belleza del canto, entonces puede verdaderamente adivinar por qué los monjes están ahí y cuál es el centro secreto de sus vidas: la alabanza de la gloria. Era costumbre de Dom Basil que, cuando hablaba de los más profundos deseos de su corazón, lo hacía en términos de belleza: «¡Qué experiencia tan maravillosa sería si pudiera conocer aquello que, entre las cosas más bellas, fuese lo más hermoso...! Ésta sería la experiencia más elevada de todas las experiencias de alegría y de plenitud total. Yo llamo Dios a la más bella de todas las cosas»
            Y si sucede, como Santo Tomás de Aquino pensaba, que la belleza es verdaderamente la revelación del bien y la verdad, entonces forma parte de la vocación de la Iglesia ser lugar de revelación de la verdadera belleza. Una gran parte de la música moderna, incluida la que se escucha en las iglesias, es tan trivial que es una parodia de la belleza. Ese mal gusto ha sido descrito como la «pornografía de lo insignificante». Quizá lo sea porque hemos caído en la trampa de ver la belleza en términos utilitarios, en lo que es útil para entretener a la gente, en lugar de ver que lo que es verdaderamente bello revela el bien.

Fr. Timothy Radcliffe: “El trono de Dios. El papel de los monasterios en el Nuevo Milenio” (2000): En Una vida contemplativa, San Esteban, Salamanca 2001, 45-67:








martes, 10 de enero de 2012

La sabiduría de José Luis Borges


            Las palabras de Jorge Luis Borges* no son música pero suenan 
como la mejor de las melodías
 en los oídos de quien sabe leer, paladear, degustar, interiorizar y,
 al fin y al cabo, vivir.  
Este texto, transmitido por  Magister Petrus, 
debería  ser el frontispicio de todos los iPad, iPhone, iPod touch, iPod nano, Pc, Mac 
y el resto de artilugios que nos acompañan hoy en todo momento, 
para así humanizarlos y humanizarnos. 


            No puedo darte soluciones para todos los problemas de tu vida, ni tengo respuestas para tus dudas o temores; pero puedo escucharte y buscarlas junto contigo. No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro; pero cuando me necesites estaré junto a ti. No puedo evitar que tropieces; solamente puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas.
            Tus alegrías, tus triunfos y tus éxitos no son míos; pero disfruto sinceramente cuanto te veo feliz. No juzgo las decisiones que tomas en la vida; me limito a apoyarte, a estimularte y a ayudarte si me lo pides. No puedo trazarte límites dentro de los cuales debes actuar, pero sí te ofrezco el espacio necesario para crecer. No puedo evitar tus sufrimientos cuando alguna pena te parta el corazón; pero puedo llorar contigo y recoger los pedazos para armarlo de nuevo. No puedo decirte quién eres, ni quién deberías ser; solamente puedo quererte como eres y ser tu amigo. En estos días oré por ti.
            En estos días me puse a recordar a mis amistades más preciosas. Soy una persona feliz: tengo más amigos de lo que imaginaba. Eso es lo que ellos me dicen, me lo demuestran. Es lo que siento por todos ellos. Veo el brillo en sus ojos, la sonrisa espontánea y la alegría que sienten al verme. Y yo también siento paz y alegría cuando los veo y cuando hablamos; sea en la alegría o sea en la serenidad.
            En estos días pensé en mis amigos y amigas y entre ellos apareciste tú. No estabas arriba, ni abajo, ni en medio. No encabezabas ni concluías la lista. No eras el número uno, ni el número final. Lo que sé es que te destacabas por alguna cualidad que transmitías y con la cual desde hace tiempo se ennoblece mi vida. Yo tampoco tengo la pretensión de ser el primero, el segundo o el tercero de tu lista. Basta que me quieras como amigo. Entonces entendí que realmente somos amigos. Hice lo que todo amigo: oré y le agradecí a Dios que me haya dado la oportunidad de tener un amigo como tú. Era una oración de gratitud, porque tú le has dado valor a mi vida.
           
            * Jorge Francisco Isidoro Luis Borges (Buenos Aires, 24 de agosto de 1899 – Ginebra, 14 de junio de 1986), escritor argentino, uno de los autores más destacados de la literatura del siglo XX. Es considerado como uno de los eruditos más grandes del siglo XX. Ontologías fantásticas, genealogías sincrónicas, gramáticas utópicas, geografías novelescas, múltiples historias universales, bestiarios lógicos, silogismos ornitológicos, éticas narrativas, matemáticas imaginarias, thrillers teológicos, nostálgicas geometrías y recuerdos inventados son parte del inmenso paisaje que las obras de Borges ofrece tanto a los estudiosos como al lector casual. Y sobre todas las cosas, la filosofía, concebida como perplejidad, el pensamiento como conjetura, y la poesía, la forma suprema de la racionalidad.
(Fuente de la biografía: Wikipedia)

miércoles, 5 de octubre de 2011

De cómo la música sana las "heridas" de un fraile pintor: Hugo van der Goes.

(Hugo van der Goes. Tríptico Portinari. Galeria Uffizi, Florencia)

Hugo van der Goes (ca.1438 -1482), considerado «el más grande pintor» en su tiempo, es la última cumbre de la cordillera que viene desde los Van Eick, Van der Weiden, Bouts, Petrus Cristus, y termina con él y su contemporáneo Memling. Forma parte de la escuela flamenca, en la que la pintura alcanza una perfección que en cierto sentido no se ha vuelto a igualar.

Gran parte de la vida de Hugo está sumida en el misterio, que también envuelve la obra. Muy pocos de sus grandes cuadros le están atribuidos con certeza, pero bastan por su calidad para justificar el prestigio de que gozó en su tiempo.

Poco antes de morir se recuperó de una enfermedad mental, tan grave que le tuvo anulado un año.

Hace relativamente poco tiempo se ha descubierto un manuscrito del convento en que pasó sus últimos años, en el cual se describen con detalle su enfermedad, las interpretaciones a que dio lugar y la curiosa terapéutica con que creyeron haberle curado.


Bruselas 1481. Un grupo de monjes sudorosos y asustados sujetan al pobre loco que forcejea con ellos y que suplica entre gritos y gemidos que lo maten o le dejen que lo haga él mismo, pues está condenado sin remedio al fuego eterno. Parece «frenesis magna» o «posesión por el Mal Espíritu». Sombría alternativa.

El padre Tomás Wyssem, prior del convento de Rouge-Cloitre, que acaba de abandonarlo para acudir presuroso a Bruselas en auxilio del demente, da orden de comenzar el tratamiento. ¿Inyección? Tardarán tres siglos en inventarse. ¿Lavativas? Aún no están en boga. ¿Sangría, bebedizo? No; el más apacible de los tratamientos: que se interprete música en su presencia.

La enfermedad del hermano Hugo (Van der Goes ingresó en el convento como novicio cinco años antes) tiene apariencia similar a la del rey Saúl, y, por tanto, es de esperar que se alivie con la música, tal como a Saúl le ocurrió con el arpa de David.

El sacro y regio precedente, junto a la aparente eficacia en la primera noche (pues Van der Goes, rendido, acaba tranquilizándose), justifica que se insista en el tratamiento, y durante el año de la enfermedad cuida el afable prior de que ni un solo día falte la sesión de «meloterapia». Hoy se llama así, pues la psiquiatría contemporánea ha resucitado esta vieja terapéutica (con modificaciones, por supuesto), que tiene al menos la ventaja de ser inofensiva.

Sea por el antecedente bíblico, o por el inmemorial mito de que la «música amansa las fieras», durante siglos y en las más diversas culturas se ha venido intentando esta curación melódica, especialmente en locos agitados o en quienes sufrían de «melancolía». Nuestros primeros Borbones lo muestran. No es nada fácil enjuiciar la eficacia de un tratamiento en esta última enfermedad, precisamente la que Hugo padecía, pues tiene remisiones espontáneas, a veces tan repentinas como puede ser su comienzo. Los buenos frailes quedaron convencidos de haberle curado con el diario concierto, reiterado hasta su reposición, y el tratamiento conservó prestigio. En el libro de Ficino, De vita triplici, se señalan con precisión la dieta y la música que deben usarse.

No podían saber los frailes que un año suele ser el tiempo que tarda en curar espontáneamente una fase depresiva a la edad que tenía Hugo.

¿Por qué mostró el padre Tomás tan inusitado celo en cuidar a uno de sus novicios? De que el trato no era igual con todos queda fiel testimonio en las envidias y críticas de alguno de los compañeros, que están reproducidas en la misma crónica que nos relata las vicisitudes de la enfermedad.

Hugo van der Goes no era novicio común. De vocación tardía, entró en el convento en 1476, como hermano lego, cuando tenía cerca de cuarenta años y una gran fama que aumentó con su encierro.

De antes de este año tenemos pocas noticias suyas. Se desconocen el lugar y fecha exacta de su nacimiento, pero sean estos cuales fueren (dentro de los límites en que se calcula), eligió mal el momento de nacer. Su tierra pasaba por una etapa de baja en el mercado de la pintura.

(Locos egregios. J. Antonio Vallejo Nájera. Planeta Agostini. Memorias de la historia. Barcelona, 1996, pp. 33-35).